Vacaciones en New Orleans

Ya está aquí la cruda realidad. Ya está aquí septiembre. Ya está aquí la rutina. Ya está aquí el frío. ¡¡¡¡¡BASTA!!!!!! Hay que recuperar lo mejor de lo que hayamos hecho durante las vacaciones, que yo tengo muy claro lo que es o, más bien, quién es.

Este verano he estado de vacaciones en New Orleans. La verdad es que no he ido, pero con el atracón de imágenes que están mostrando las teles durante los últimos días, me la conozco de 'pe a pa'. Terrible desgracia la que ha ocurrido en la ciudad del jazz, de BB King, de los Hornets, de los músicos negros que tocan el saxo y el clarinete... Un huracán ha todado de 'rasquis' esta hermosa ciudad y la ha arrasado. Además, sus civilizados ciudadanos han aprovechado la circunstancia para saquear comercios y quemar establecimientos.

Durante la catástrofe, en Bagdad pasó otro hecho luctuoso. Una avalancha humana sobre un puente le costó la vida a más de 1000 personas. ¡Mil! Diferencia: eran árabes e iraquíes. Un día después nadie hablaba de ellos. En cambio, todas las cadenas de radio y televisión han enviado a periodistas a New Orleans para que hagan desgarradores crónicas desde la ciudad encharcada.

Los seres humanos pueden ser muy distintos entre sí durante su vida. Pero al morir, todos somos iguales. Bien vivas en el primer mundo, en el país más poderoso del planeta o en un lugar tan conflictivo como Irak. Desgraciadamente, la reacción ante la muerte sigue siendo desigual. En fin, el tiempo nos pondrá a todos al mismo nivel.