Quiero ser Pocholo

Ayer vi en laSexta Pocholo Ibiza'06. Se trata de una especie de serie en la que las cámaras siguen al singular personaje en el transcurso de su vida. Y claro, su vida no tiene desperdicio. Se compra una casa, se compra una moto, se salta las normas, va a puticlubs, se baña en la piscina, tiene a gente a su servicio, tiene piscina, viaja por toda España para pinchar discos, vende helados, vende tréboles de cuatro hojas, las chicas le persiguen, bebe… Unas vacaciones permanentes. Dos excentricidades:

- Una chica llega a su casa recién comprada. Le dice que echa de menos el frío. Solución Pocholo: traer nieve a Ibiza. Eso es imposible, le dicen, se deshará con el calor. No hay problema. Algo que se le parezca. Un camión de sal. Que traigan sal! Y sí. Tan sólo tiene que descolgar el teléfono y pedirle a su hombre de confianza un camión de sal para que se lo traigan. Ante el bochorno de la chica, que, claro está, piensa, "a buenas horas he abierto la boca".

- Pocholo va a comprase una moto. Una cuatro tiempos potente, claro. Cuando se la va a llevar, el tío de la tienda le dice: "¡Oye, ponte el casco!". Él no tiene y dice que no lo necesita. El otro le insiste y le convence para que compre uno. No pasa nada, él lo compra. Sale de la tienda, con el casco en el brazo, se monta en la moto y se pira. El de la tienda grita: "Pero ponte el casco!!" Pero él pasa. Se cruza con un coche de la policía nacional que se detiene a su altura. No para multarle por no llevar el elemento obligatorio de seguridad. Es para decirle "Qué pasa, Pocholo!" Se despiden, ellos en su coche patrulla, él en su moto y con su casco en la mano.